Hemos pasado un fin de semana complicado entre cambio de medidas del gobierno para controlar esta horrible pandemia, mal tiempo, horario de invierno, y demás cosas a las que cuesta adaptarse. Pero ha amanecido un día precioso. Y eso es con lo que tenemos que quedarnos. Al final, acaba saliendo el sol. Acabaremos viendo una solución para esto tan espantosa que nos ha tocado vivir. Mientras tanto la actitud es sonreír, intentar dar lo mejor de nosotros mismos, y sobre todo no desesperarnos.

Hoy llevo uno de esos estilismos con los que me siento especialmente identificada: mi eterno jersey de rayas, ya he perdido la cuenta de cuántos tengo, y esta falda tan especial de Oca Barcelona. La parte buena de la llegada del frío es que al fin he podido estrenar mis botas de Micuir (Coco boots es el modelo) que me tienen enamorada.

Os mando mi mejor sonrisa, y carros de esperanza para lo que viene ❤️
Mil besos,

Mery