Llego a My Little Momó, en Zurbano 65 (Madrid). Un lugar increíblemente decorado que está dentro de un espacio que se llama Oculto Hair, donde se mezclan peluquería, arte, moda y arquitectura. El sitio es como si te teletransportas a Nueva York. Directamente.
Voy a hacerme una ansiada «Mani-pedi» después de este confinamiento de 70 días…Admito que tengo tentaciones de llorar de emoción, pero me calmo al ver la cantidad de medidas de higiene y seguridad que tiene el local. Nada más entrar me cambio la mascarilla, y me aplican gel hidra alcohólico en las manos.
Ya sentada en sus maravillosas butacas rosas Andrea y Rutbelis (súper atentas conmigo), me dan a elegir el tono del esmalte y me muestran mi cesta con todo el instrumental perfectamente desinfectado y de un solo uso.
Es entonces cuando sumerjo los pies en agua templada, para retirar las durezas.Me siento como si volviera al seno materno… ¡qué bienestar oye!. Pero os sigo contando. Se elimina el esmalte anterior. Y se hace el arreglo de uñas. Después los pies se introducen en unos guantes con queratina para que se produzca una hidratación máxima. Se hace lo mismo con las manos (pobrecitas, que tanto han sufrido el confinamiento).
Se retiran los guantes y proceden a un masaje que te lleva al paraíso de pies y piernas. Y el último paso es el esmaltado. Yo elijo un rojo de OPI.
Para la parte de manicura se han instalado unas mamparas de metacrilato que para seguridad de clienta y profesional. Mirad:
Salgo como nueva, con las manos y los pies impecables.
Podéis pedir cita online chicas. La pedicura son 43 euros, y la manicura 28.
¡Un beso enorme!